En los vehículos arriba mencionados pueden producirse ruidos en el compresor tras haber arrancado el motor que se encontraba frío.
Este problema aparece, sobre todo, cuando la temperatura exterior es muy baja. Este hecho no tiene por qué achacarse necesariamente a un fallo del compresor.
Generalmente, estos vehículos van equipados con un compresor de paletas rotativas. Debido a las bajas temperaturas puede entrar líquido refrigerante en el compresor y puede producir ruidos (golpeteos) después de haber arrancado el motor.
Tras un breve tiempo de funcionamiento, el refrigerante es succionado de nuevo en estado gaseoso y el ruido desaparece.
Por ello, no se trata de un fallo técnico, sino de una circunstancia que puede aparecer dependiendo del tipo de fabricación y de la climatología.
Indicación de seguridad importante
No ayuda en absoluto
Muy útil