En los vehículos arriba mencionados puede producirse un fallo en la dirección asistida.
Este fallo puede deberse a un relé defectuoso en la unidad de control de la dirección asistida. En determinadas circunstancias, en el momento de la fabricación de la unidad de control pudo entrar humedad en el relé. Este hecho podría provocar un cortocircuito y con ello un fallo en la dirección asistida.
La dirección se vuelve muy dura, y además se activan los testigos luminosos y acústicos que avisan de un fallo (tanto testigo luminoso como sonido de advertencia). A pesar del fallo en la dirección asistida, el vehículo puede conducirse y el volante puede girarse.
El fabricante del vehículo es consciente de esta problemática y ya ha informado a los propietarios de los vehículos afectados.
En un taller especializado podrán sustituir el relé defectuoso de los vehículos que presenten este problema.
En el sistema de garantías de Toyota, la reparación se realiza según el correspondiente nº de chasis.
Por diversos motivos es de suponer que no se hayan revisado ni reparado todos los vehículos.
Indicación de seguridad importante
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Muy útil