Para poder fijar limpiamente un grupo de cables unidos, suele necesitarse algo más que una simple abrazadera. Nuestras abrazaderas para cables resisten tanto las inclemencias del tiempo como los ácidos orgánicos diluidos, aceites, gasolina, aguas salinas, disolventes y grasas, y además son difícilmente inflamables. Incluso si el diámetro del cable que deba unirse es muy pequeño, ofrecen una sujeción perfecta y por ello no se necesita ningún otra cinta de relleno ni ningún otro recurso para realizar la fijación.